La Pimpa esta semana anduvo con el culo a dos manos y de Perico no quiere ni hablar. Le dijo que iba pa’ ganeguín a echa una pesca y estuvo dos días por ese sú…y ella no lo vio salí con caña, ni engodo, ni las calamares.
En la habitación, por mucho que estuvo jurga que te jurga no encontró el timple. Y eso de que la mar estaba revirá y no picó ni una panchona, no se lo cree ni jarta grifa.
Dice Pimpa que este hombre la va a chiflá, que fuerte cabeza pa’ un caldo pescado. Ya le dijo que se lo picara menúo que lo quiere pa’ la cachimba y que largue pa onde estuvo. Con lo gandú que es y le falta un agua.
Ya volvió, pa’ llí anda escarranchado como un lagarto.
Sabe más que los ratones colorados y está más feliz que un cochino en un charco.
Mira, coño, cochino no se, pero se está quedando que como siga así, va a terminar gordo como una tonina.